
Hoy decidí limpiar mi teléfono móvil. Había llegado a un punto en el que la emisión/recepción de los mensajes empezaba a dificultarse, producto de un almacenamiento innecesario de mensajes sucedidos durante este último mes del año. Mientras estaba afectada a semejante tarea productiva decidí repasar algunas cuestiones vinculadas a la configuración de mi fiel compañero hasta que llegué al ítem elección de wallpaper, la cuestión central de este post.
Juro que lo intenté mil veces. No pude. Dicen que de vez en cuando es bueno renovarse, cambiar los muebles de lugar, hacerse un corte de pelo nuevo pero ¿cambiar de wallpaper? En mi viejo Motorola la imagen de Aidan y Carrie aparece cada mañana y cada noche cuando lo apago y me voy a dormir. ¿Cómo borrar esa imagen?
Carrie y Aidan son novios. Viven juntos. Él es capaz de ser feliz un sábado a la noche con un balde de pollo frito y una pelea de box. Ella, en cambio, necesita como el aire conocer todos los lugares de moda con sus amigas o seguir engrosando la lista de gente cool y amigos gays.
Él le va a pedir (una vez más) que se casen, que con esa ropa están perfectos para la ocasión, que para qué esperar más tiempo. Ella (una vez más) volverá a romperle el corazón...y el mío.
Me puse a pensar que hay imágenes que es mejor congelarlas en el tiempo...y en el celular. El pedido de casamiento frustrado de Aidan es una de ellas. Otra vez será.