31 enero, 2014

Cine de bolsillo

Foto de mi libreta cinéfila
Foto de Monster Blocks
Todo amante del séptimo arte debería tener una. 
En realidad, creo que lo mejor sería llevarla siempre encima para registrar esos detalles exquisitos después de salir de la sala. Además, ocupa poco espacio en la cartera de la dama o el bolsillo del caballero.
El contenido de la página es preciso y concreto:

  • Título de la película
  • Director
  • Género
  • Año
  • Origen
  • Actores principales
  • Comentarios y...la frutilla del postre:
  • Puntaje (con estrellitas incluidas para colorear!!!!)

La libreta cinéfila es una creación monstruosa completamente hecha a mano por los amigos de Monsterblocks, un equipo de diseñadoras e ilustradoras que fabrican cuadernos, agendas, recetarios y otros objetos de diseño con materiales reciclados, mediante técnicas tradicionales de encuadernación y armado. Cada diseño es único. Es decir, no van a encontrar dos iguales. Por eso es tan difícil elegir!
Tuve la suerte de encontrar la mía en una de las tantas ediciones de la maravillosa CATFEST y fue amor a primera vista.
Las chicas enseñan con esmero y atención su producto y dejan que una revuelva hasta encontrar el objeto de deseo. 
Por si fuera poco, la libreta cinéfila tiene una yapa. Se trata de una plancha de adhesivos para completar nuestras reseñas con íconos del cine. Desde la Coca Sarli, Marilyn Monroe, Tarantino, Hitchcock hasta Indiana Jones o ET, entre otros.

Como verán, este año encontré el objeto ideal para llevar ordenado y al día el balance cinéfilo del vecinito.
Pero sobre todo, una buena excusa para despuntar el vicio del cine y la escritura.
Un combo perfecto. 
Foto de Monster blocks

Para chusmear más sobre Monsterblocks pueden ir acá:  https://www.facebook.com/monsterblocks

28 enero, 2014

Podrán decir que soy un soñador, pero no soy el único


Ver el mundo, afrontar los peligros, traspasar los muros, acercarse a los demás, encontrarse y sentir. Ese es el propósito de la vida.
(La vida secreta de Walter Mitty)


Enero es sinónimo de temporada alta. No sólo en el mar o en las sierras, también en el cine.
Durante el primer mes del año se estrenan muchas películas "oscarizables", y otras que si bien no llegan a esa categoría son la punta de un iceberg, una pequeña parte del todo que vale la pena descubrir.
La vida secreta de Walter Mitty es un buen ejemplo.

El famoso Walter Mitty es un amigo de la casa: Ben Stiller, el hombre de los mil nombres. Focker, Zoolander, Tenenbaum, Greenberg y ahora Walter Mitty, responsable del departamento de fotografía de la revista LIFE, uno de los tantos empleados a punto de perder su trabajo cuando la empresa decide achicar costos para convertirse en una publicación digital.

Walter Mitty va por la vida con cara de carnero degollado. Anodino, tímido y con serias dificultades para vincularse con la chica que le gusta no sabe en qué momento el nuevo directorio de la compañía le cortará la cabeza. Mientras tanto, se dedica a lo que mejor sabe hacer: soñar despierto.  En su cabeza es amo y señor de las aventuras más extremas. Lucha contra tiburones, rescata una mascota de un edificio en llamas, cumple la fantasía de tirar a su jefe por la ventana y hay más, pero ninguna comparable a la sensación de convertirse en el verdadero protagonista de su vida y hacer honor al lema aquel de ver el mundo, afrontar los peligros que ya citamos arriba y que promulga la revista en la que trabaja . La misma revista que lo ignoró durante años, en un sótano en penumbras, revelando fotografías de hechos significativos. Esta vez, el único y verdadero protagonista será él y el motor que impulse su odisea, el amor.  No sólo el amor por una persona, sino también el amor por uno mismo, por su familia, su trabajo y por tratar de cambiar el día a día.

Sean Penn, una de las agradables sorpresas de la película de Stiller
Lejos quedó la imagen del Focker enfermero sometiéndose al detector de mentiras de su suegro De Niro para ganarse el cariño y respeto de la familia de su novia. Esta vez, Ben Stiller decidió hacer una película sobre algo que nos pasa a todos. ¿A quién no le gusta soñar despierto? Imaginar que podemos ser héroes aunque sea por un día, como dice David Bowie. Son momentos, segundos tal vez, en los que nos evadimos y dejamos que la imaginación haga lo suyo.
Con esta película, Ben Stiller nos viene a decir que vale la pena soñar porque en algún momento nuestra vida dará un giro de 360 grados y viviremos una gran aventura. Claro que para eso no es necesario irse hasta Islandia o escalar una montaña peligrosa, como le pasa al protagonista.

Sin ser un manual de autoayuda La increíble vida de Walter Mitty es un viaje que vale la pena hacer. Hay que buscar el camino, no desistir en la búsqueda, encontrarlo y seguirlo.
Nada más propicio que empezar el 2014 con esta película...

Por muchos viajes más de descubrimiento.
Sólo apta para soñadores empedernidos.